FC Barcelona y Real Madrid no se hicieron nada la noche de hoy en el Camp Nou. Después de 17 años no se veía un 0-0 entre ambos equipos.
Se generó mucha expectativa por llegar a este partido en igualdad de condiciones, pero terminó quedando en stand by. El Clásico fue un partido de ida y vuelta y con mucha posesión en el medio campo, pero solo hasta 3/4 que en la última zona de definición. Mucha fricción, tarjetas y reclamos, pero poco fútbol asociativo a gran escala y nulidad absoluta de participación en las redes.
FC Barcelona y Real Madrid se jugarán LaLiga hasta el final, ¿por quién apuestas?
Los de Zinedine Zidane estuvieron mucho mejor que el equipo blaugrana en cuanto a actitud, balance, equilibrio futbolístico y ocasiones, pero no terminaron de convencer a sus hinchas de cara al arco. Las opciones de gol llegaron mucho más con tiros de media distancia que un mano a mano, pero Marc-André ter Stegen respondió bien. El caso de Barcelona fue más sorpresivo, porque no se vio un equipo compacto, con posesión más pasiva que activa y sin tanta precisión. Lionel Messi no tuvo una frente a Thibaut Courtois porque su participación se hizo más activa en el medio campo que en la zona roja del arco blanco. El resto de blaugranas, también sin éxito.
Dos polémicas -una más clara que la otra- con un mismo protagonista: Raphaël Varane. El francés de 26 años ingresó al área culé en dos oportunidades y tuvo un par de fricciones dignas de cuestionar. El planchazo de Lenglet y la jalada de Ivan Rakitić en un tiro de esquina que el VAR no quiso revisar. Además del offside de Ferland Mendy en el gol -anulado- de Gareth Bale. Tuvieron que pasar 17 años (49 partidos) para repetir un FC Barcelona-Real Madrid sin goles. Eso fue el clásico. Más expectativa que realidad.
Luis escalona
Fue un buen partido